No había tal mesa servida. Esa fue la primera alerta de Lenín Moreno, confirmando que su coideario Rafael Correa había ocultado y maquillado las cifras de la colosal deuda pública externa e interna, que según moreno llegaría a 60 mil millones de dólares. Ahora, una segunda clarinada, esta vez de la veeduría conformada por la contraloría, que ratifica y amplía lo señalado: la cifra subiría a 70 mil millones, de acuerdo a León Roldós Aguilera. Y aún se habla en potencial debido a que parte de la información se mantiene en reserva, en especial aquella relativa al financiamiento chino/tailandés garantizado con petróleo. Este, sin duda, es el eslabón más corroído de la cadena de corrupción construida durante la década pasada: haber contratado deuda costosa pagada con petróleo descontado, generando un esquema de enriquecimiento doloso de grupos intermediarios vinculados al correato.
Presentamos la primera de tres entregas, que echa luz para identificar el sendero del dinero del petróleo.