NILSEN ARIAS, UNA MANO DE VIDRIO EN PETROECUADOR



NILSEN ARIAS, UNA MANO DE VIDRIO EN PETROECUADOR

Fernando Villavicencio Valencia1 julio, 201728min9477
Fernando Villavicencio Valencia1 julio, 201728min9477
NA-LF1
En lo que va de la revolución ciudadana, han rodado decenas de cabezas en el sector petrolero, otras se han reciclado. Pero hubo una, la del Gerente de Comercio Internacional de Petroecuador, Nilsen Arias Sandoval, que se mantuvo soldada con titanio sobre los hombros del vicepresidente Jorge Glass Espinel, desde el año 2010. Arias fue el brazo ejecutor de los negocios con China y Tailandia, por lo que más de 100 mil millones de dólares pasaron por sus manos. Su nombre consta en varios informes con responsabilidad penal, así como en libros y reportajes marcados por signos de corrupción. Pese a ello, nadie se ha atrevido a ponerle un dedo encima, pues su petropoder forjado en la relación con Glas lo volvió intocable. en junio abandonó el cargo en medio de forcejeos. Aquí la historia:

Cuestionado por legisladores de oposición, durante su comparecencia a la Asamblea Nacional (junio de 2017), el ex Fiscal del Estado, Galo Chiriboga Zambrano, justificó su inacción en contra de funcionarios petroleros del régimen de Rafael Correa, en la ausencia de informes con responsabilidad penal de la Contraloría. Sin embargo, en el caso del exsubgerente de Comercio Internacional de Petroecuador, Nilsen Giordano Arias Sandoval, el 23 de diciembre de 2016 llegó a manos de Chiriboga un documento de 21 fojas remitido por el Secretario de la Contraloría, Luis Miño Morales, el cual contiene el informe con responsabilidad penal del examen especial a la declaración patrimonial de Nilsen Arias, suscrito por el Director de Asuntos Éticos, Participación Ciudadana y Control, Oscar Williams Altamirano. Desde entonces, hasta la publicación de esta investigación, el tema se ha mantenido en el mayor de los silencios.

Pero esa no es la única acusación en contra de Nilsen Arias, que el otrora fiscal Chiriboga haya coleccionado en sus archivos. En 2012, el Director de Auditoría 3 de la Contraloría, Galo Carrillo Ureña, remitió otro expediente con responsabilidad penal señalando al poderoso funcionario petrolero, como coautor de un presunto delito de peculado, al haber autorizado la compra de un cargamento de diesel a la empresa mexicana PMI, el cual en un acto de magia, salió de Texas-USA, dos días antes de que se abran los sobres con las ofertas. El documento concluye que se adjudicó el contrato a PMI con una diferencia superior de casi 2 dólares por barril, frente a la oferta de Blue Oil.

Según el “conocimiento de embarque”, el cargamento lo realizó la compañía intermediaria Glencore, inhabilitada para contratar en el país, es decir, se utilizó a PMI como pantalla. El caso también era investigado por la Fiscalía, con base a denuncias de Cléver Jiménez y Galo Lara, pero en 2012, la Fiscalía, sorpresivamente, solicitó el archivo de la causa, petición aceptada por el Juez, desconociendo el informe con responsabilidad penal emitido por la Contraloría.

NEGOCIADOR DE VIDRIO Y GERENCIA PETROLERA

Con seguridad, Nilsen Arias Sandoval, no conoce el color del petróleo, pero su huella consta en los más controversiales contratos de compra venta de petróleo, ventas anticipadas, líneas de crédito e importación de derivados. Por las manos de este ciudadano pasó una de las mayores riquezas del país: la colosal cifra de 100 mil millones de dólares.

Entre sus credenciales para asumir la gigante responsabilidad en Petroecuador, a más del manejo temporal de la pequeña empresa intervenida, EICA, y la compañía Monteolivo (cementerio), de la cual fue removido por irregularidades, Arias exhibiría como experiencia empresarial sus habilidades en la venta de vidrio templado.

Una vez en Petroecuador, Arias fortaleció su relación con el entonces ministro de Sectores Estratégicos, actual vicepresidente de la República, Jorge Glas Espinel. Desde entonces, ese vínculo ha sido insondable y ha marcado la comercialización de hidrocarburos del régimen revolucionario. Glas es acusado por la oposición de corrupción en el sector estratégico; es más, un proceso judicial en la Florida — USA, lo vincula con sobornos entregados por la empresa Caminosca, bajo el código de “Vidrio”, en inglés “Glass”. Desde entonces en Ecuador se ha extendido el término.

Toda la arquitectura de comercialización levantada sobre las alianzas estratégicas, desde el canje de crudo por derivados con Ancap de Uruguay y Pdvsa de Venezuela, hasta los contratos con Petrochina, Unipec y Petrotailandia, estuvieron bajo la responsabilidad de Arias Sandoval. En toda su gestión contó con la asesoría de la consultora radicada en Miami, Hogan Lovells, cuya representación en Ecuador la maneja el estudio jurídico Lexim de Jorge Cevallos Carrera y Rodrigo Borja Calisto.

Nilsen Arias Sandoval es un privilegiado. Su título de bachiller en físico matemático le fue suficiente meritocracia para dirigir desde 2010 la comercialización externa de hidrocarburos, por un sueldo mensual de U$ 5.520.

Dice haber logrado una maestría en Planificación Estratégica, Nuevas Tecnologías y Administración, pero en todos sus años de servicio público con la Revolución Ciudadana no ha registrado sus supuestos títulos en la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt). De hecho, en esa entidad, no registra ni la maestría ni ningún título a su haber. Un requisito básico para ejercer el cargo que ostentaba en Petroecuador. Aún así, el diario oficial El Telégrafo solía mencionarlo como “ingeniero”.

Darío Castillo Lanceros, presidente de Vitemcoecuador, en diciembre de 2008, entabló un juicio en contra de Arias por “abuso de confianza” (estafa), aduciendo que había realizado acciones fraudulentas, con el fin de sustraer dinero de la empresa para su provecho personal.

En el proceso judicial se relata que Arias Sandoval usó comisiones de otros trabajadores que superaban los USD 280.000,00 y que según una auditoría realizada a la mercadería de la empresa, se estimó que faltaban unas 2948 piezas de parabrisas, cuyo valor ascendía a USD 120.000. También se le acusó a su esposa, Irma Romero, de recibir “jugosas sumas”, por alterar dolosamente la contabilidad. Nilsen Arias, solo pudo ganar el juicio una vez que ya ostentaba un gran poder en el gobierno y contaba con amigos como su abogado Carlos Bravo y Jorge Glas Espinel.

GRIPE, DINERO Y AMOR NO SE PUEDEN OCULTAR

A su ingreso a Petroecuador en 2010, Nilsen Arias Sandoval, tenía un jeep azul, vivía con su esposa Irma Romero Espinosa y sus dos hijos Juan Diego y Nilsen Andrés, en una modesta residencia en la avenida Occidental, barrio El Condado, al norte de Quito.

Luego de revelada la trama de corrupción en la refinería Esmeraldas, la Contraloría del Estado, realizó varios exámenes especiales a los patrimonios de las principales autoridades del sector petrolero. Nilsen Arias, no pudo esquivar la investigación, peor aún ocultar el dinero. El examen especial DAEPCyCP-0054–2016, que se extiende desde el 14 de abril de 2010 hasta el 31 de mayo de 2015, e incluye a su cónyuge y a sus hijos, contiene sorprendentes revelaciones, aunque se reduce a los bienes y recursos económicos registrados en Ecuador.

UN PEQUEÑO PARQUE AUTOMOTRIZ

Nilsen Arias, reportó a la Contraloría haber adquirido en 2011 el auto Ford Scape de placas PBN 6667, con la venta de dos vehículos: un honda PBL 6423 en USD 18 mil y un Mercedes Benz PJV 330 en USD 10.000. En total, 28 mil dólares, valores no registrados en los estados de cuenta de Arias. La Agencia Nacional de Tránsito reportó que el referido vehículo fue adquirido en 2010.

Contraloría observa que Arias no presentó los contratos de compra de 2 automotores incluidos en 2010 en su declaración de bienes. Otro vehículo reportado a nombre de Irma Romero, es un Ford Explorer de placas PCI 9301, avaluado en USD 52.792, del cual tampoco se justificó el origen del dinero.

En 2014, la esposa de Arias, adquirió un vehículo tipo jeep Mercedes Benz, de placas PCN 1557, en USD 90.000. Una parte del valor, USD 41.000 correspondía a un crédito otorgado por la empresa Administraciones Carey del Sur S.A., domiciliada en el paraíso fiscal de Panamá. Los USD 49.000 faltantes fueron cubiertos con la entrega de un vehículo Lexus RX de su propiedad, según respondió a la Contraloría.

De acuerdo con el examen especial, la familia Arias Romero no logró justificar con documentos el origen de los USD 90.000. El informe precisa que no se encontró ningún documento que verifique la transferencia del dinero de la firma panameña.

LA EMPRESA OFFSHORE QUE GENERA SOSPECHAS

La relación de Irma Romero con la empresa Administraciones Carey del Sur, no se reduce al referido crédito. De acuerdo con la investigación, la cónyuge de Arias recibía desde 2013 USD 15.000 dólares mensuales, por servicios prestados a la citada compañía offshore.

Focus confirmó que se trata de una empresa pantalla, constituida en julio de 2011 por la firma de abogados Sucre, Arias & Reyes. Registra como accionistas a Emma Lina Martínez y Elba Fernández de García, ciudadanas de nacionalidad panameña. Entre los objetivos de Administraciones Carey del Sur, están los de tomar y recibir dinero en préstamo con o sin garantías; se incluyen actividades de compra, venta, operación de buques y suscripción de contratos de transporte marítimo; además, abrir y mantener cuentas bancarias. Sorpresivamente y coincidiendo con las fechas de inicio del examen especial al patrimonio de Nilsen Arias, en diciembre de 2016, la offshore fue disuelta.

¿Qué actividades cumplió la empresa entre el 2011 y 2016, dentro los objetivos de su constitución (prestar dinero, comprar y arrendar buques), operaciones por las que, la cónyuge de Nilsen Arias, recibía una remuneración mensual de USD 15.000, además de un crédito de USD 41.000, que sirvió para la adquisición de un vehículo en 2014? ¿Quiénes están atrás de los testaferros panameños? Contraloría, al parecer, no quiso dirigir la investigación hacia el paraíso fiscal de Panamá, y la Fiscalía aún guarda silencio al respecto. Sin embargo, varias pistas apuntan a que la compañía está relacionada con el ex hombre fuerte de la comercialización de hidrocarburos.

EMPRESAS DE PAPEL Y OPERACIONES ENCUBIERTAS

La pareja de Nilsen Arias, registró ingresos de USD 265.000 entre 2013 y 2015, por una supuesta prestación de servicios profesionales a la empresa CIT COVERGLASS (no domiciliada en Ecuador), según un contrato de asesoría en marketing, suscrito en San José Costa Rica, en febrero de 2011, con una remuneración mensual de USD 5.000. De acuerdo con la información presentada por Arias a la Contraloría, la empresa CIT COVERGLAS, adquiría equipos médicos a la empresa Multiplay. El órgano de control señaló que Romero Espinoza, no demostró trabajos realizados para esa compañía, además que las facturas de pago no coinciden con las fechas y los montos de los depósitos realizados en la cuenta bancaria de Romero.

Nuestro portal verificó que el apoderado de CIT COVERGLAS es Mauricio Romero, hermano de Irma; además, confirmó en la Superintendencia de Compañías, que la firma Multiplay, fue constituida en Ecuador por los cónyuges Arias — Romero, la cual no registra actividad real, tampoco ha declarado Impuesto a la Renta y finalmente fue disuelta el año 2012 con resolución 1909. ¿Cómo una empresa disuelta realizó operaciones comerciales entre 2013 y 2015 y pagó remuneraciones a la misma gerente propietaria?

En total, la cónyuge del ex gerente de Comercio Internacional de Petroecuador, no logró justificar ingresos por USD 343.674, depositados en la cuenta corriente 1025983248 del Produbanco, tampoco presentó facturas o documentos de los pagos de la firma panameña Administraciones Carey del Sur. Además se ocultaron 4 cuentas de ahorro de Romero y una de Arias, de las cuales dos se mantienen activas.

TESTAFERRISMO EN LA PROPIA FAMILIA

Aunque el expediente de la Contraloría no lo señala explícitamente, el procedimiento utilizado por Arias, conduce a sospechar la existencia de testaferrismo. En este punto aparece su suegra, Irma Espinoza Larreátegui, quien suscribe en 2012 la escritura de compra de una lujosa suite en el edificio Suites “S“ Sheraton, ubicado en una zona exclusiva de la ciudad de Quito. Un año después, en 2013, la propiedad apareció en poder de la hija. Según el equipo auditor, Arias no pudo justificar el origen del dinero para la compra de la suite, configurándose el enriquecimiento ilícito. La referida propiedad fue arrendada por los esposos Arias — Romero, entre 2013 y 2014, a la constructora Norberto Odebrecht, envuelta en escándalos de corrupción.

Otra propiedad adquirida mientras manejaba las riendas petroleras, fue una vivienda en la zona residencial de Tumbaco — Quito, en el conjunto Alfha, comprada en 2013 en USD 142.065, con un crédito de USD 80.000 al Banco del Pacífico, dinero depositado en la cuenta de Arias Sandoval. Según la información proporcionada por el examinado, se completó el valor de la propiedad con un préstamo de USD 54.000 realizado por su esposa y USD 8.065 de las remuneraciones de Petroecuador, valores también puestos bajo sospecha.

En 2013, la pareja Arias — Romero vendió en USD 55.000 a Rocío del Carmen Guerrero, otra propiedad ubicada en el barrio Cotocollao, de la ciudad de Quito, la cual constaba a nombre de sus hijos menores de edad desde el año 2007. Contraloría observa que esta propiedad tampoco se hizo constar en la declaración de bienes de Nilsen Arias.

MOVIERON MÁS DE USD 1 MILLÓN EN CUENTAS BANCARIAS

Luego de repasar el mapa de propiedades registradas en Ecuador a nombre de los Arias — Romero, llegamos a los movimientos de las cuentas bancarias locales del poderoso hombre de negocios con China y descubrimos que, solo entre los años 2010 y 2015, Petroecuador depositó en las cuentas de Arias USD 583.976,65, de los cuales USD 319.128,17 corresponde a remuneraciones y USD 234.471,64 a viáticos internacionales.

Dos cuentas bancarias del Produbanco a nombre de Irma Romero Espinoza, también fueron investigadas: en la cuenta de ahorros 12062064091, se encontraron acreditados USD 176.334, de los cuales más de USD 40.200 no fueron justificados; mientras en la cuenta corriente 1025963248, se acreditaron valores por USD 343.574, los cuales no fueron justificados. En total la esposa de Arias manejó en sus dos cuentas nacionales la suma de USD 519.908, durante el período auditado (2010–2015). Solo en movimientos bancarios en las cuentas locales de la pareja Arias — Romero, entre los años 2010 y 2015, se registra una suma de USD 1´103.884, un promedio mensual de ingresos de U$ 18.398, durante los cinco años auditados.

Esta cifra incluye solamente los ingresos registrados en las cuentas bancarias de Ecuador. Resta por valorar las propiedades nacionales, de las cuales como señala Contraloría, no hay suficientes respaldos, así como las cuentas bancarias y bienes en el extranjero, que según información preliminar serían cuantiosos. Focus trabaja otra investigación al respecto.

Nilsen Giordano Arias Sandoval, luego de siete años de vivir la revolución ya no es el mismo ciudadano que ingresó en 2010, con su jeep azul y una peinilla en el bolsillo de la camisa. Él nunca estuvo muy convencido del discurso antiimperialista de su líder Rafael Correa.

Este nuevo ser, transformado en el aceitoso mundo petrolero, prefiere que su familia disfrute las mieles del imperio americano. Su esposa Irma Patricia desde el año 2013, viaja constantemente a USA a visitar a sus hijos que estudian en el “paraíso del capitalismo“. Su último ingreso a Estados Unidos fue el 4 de abril de 2016 donde permanece hasta la fecha a la espera de Nilsen Giordano, quien arribará de Ecuador, luego de haber servido con infinito amor a la Revolución Ciudadana.

Esta investigación fue realizada por Fernando Villavicencio Valencia;  publicada el 01 de julio de 2017.