El proyecto eólico mas ambicioso del país, llamado Minas de Huascachaca, destinado a generar 50 megavatios de energía limpia, adolece de sobreprecios y subdivisión de contratos; los protagonistas son ElecAustro que favoreció desde el inicio a la empresa china Dongfang que a su vez firmó contratos con terceros incluso antes de adjudicarse la construcción de la obra.