Lo bueno, lo feo y lo pendiente que deja Diana Salazar



Lo bueno, lo feo y lo pendiente que deja Diana Salazar

Redacción La Fuente - Periodismo de Investigación21 mayo, 202516min
Redacción La Fuente - Periodismo de Investigación21 mayo, 202516min
FISCAL DIANA SALAZAR
Diana Salazar se despide con “unas de cal y otras de arena” de su cargo de Fiscal General del Estado. Un día después de haber recibido una reparación: las disculpas públicas de Priscila Schettini y de Angélica Porras, por haber cometido violencia política de género en su contra; y también luego de que se iniciara el juicio en contra de Jorge Glas y Carlos Bernal en el caso Reconstrucción de Manabí, hizo pública su renuncia.

Es que, tras culminar sus seis años como fiscal general, en abril, estaba prorrogada en funciones. No obstante, la Fiscalía a su cargo logró también armar el Caso Ligados. Una de sus últimas diligencias fue pedir día y hora para la vinculación de Andrés Arauz, emblemático y leal correísta y ex candidato a la Presidencia por esa tienda política. En los chats, él aparece como el líder de una estructura que buscaba apropiarse para su tienda política del CPCCS, de la Superintendencia de Bancos e incluso manejar el TCE.

Así, la fiscal ibarreña y madre de dos hijas, sorprendió a muchos esta mañana al anunciar su renuncia a la Fiscalía General del Estado, tras seis años, un mes y doce días de ocupar ese cargo. También advirtió que ha decidido radicarse fuera del país.

Me voy con la frente en alto, a sabiendas que los mafiosos no me perdonarán haber desmantelado sus redes criminales ni haberlos desenmascarado cuando, bajo el disfraz de salvadores de patria, en realidad la estaban saqueando. Desde el inicio de mi gestión he vivido bajo amenaza constante y he perdido la libertad de moverme con normalidad. Por ello, he tomado la difícil, pero necesaria decisión de radicarme fuera del país”, dijo en una clara y firme carta de renuncia.

Renuncia de la hasta hoy fiscal general, Diana Salazar

De esta manera concluye un ciclo a lo interno de la Fiscalía que inició en 2001. Empezó desde abajo, ocupando funciones de asistente, secretaria, agente fiscal y coordinadora nacional en   delincuencia organizada transnacional, violencia de género, lavado de activos, transparencia y lucha contra la corrupción, entre otros.

En 2018 fue nombrada directora general de la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE), y el 8 de abril de 2019 fue posesionada ante el Pleno de la Asamblea Nacional como fiscal general.

Agradecimientos e incertidumbre

Luego de conocerse la noticia, las redes sociales se llenaron de mensajes de agradecimiento por el trabajo realizado, pero también de incertidumbre sobre lo que podrá venir luego de su salida.  Entre tanto, el presidente de la Asamblea, Niels Olsen anunció que este 21 de mayo, la Asamblea tratará la renuncia de Salazar.

En su periodo, Salazar debió llevar adelante investigaciones de casos que involucraron a los más altos funcionarios del poder y, como parte de ello, desnudar la participación del crimen organizado, ya infiltrado en las más altas esferas.

También hubo pronunciamientos de la Embajada de EEUU y de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana en los que se agradecía el trabajo y su compromiso con la justicia.

Pronunciamiento de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.

En contraste, los miembros del correísmo le recriminaron. La ex candidata del correísmo, Luisa González, aseguró en sus redes que «hasta podrás escapar de la justicia humana»…»y jamás de la mano de Dios».

Las victorias frente al crimen organizado

Aunque con una Fiscalía bajo asedio por parte de sectores claramente identificados (narcopolítica, plataformas creadoras de contenidos serviciales al narco), pudo salir adelante y obtener victorias, por primera vez, en casos emblemáticos como:

El caso Sobornos, denunciado por el periodista y candidato presidencial Fernando Villavicencio como Arroz Verde, fue más tarde rebautizado (Sobornos) y es el que al final tiene prófugo a Rafael Correa y logró encarcelar a Jorge Glas.

Tras el asesinato de Fernando Villavicencio, continuó con casos como Metástasis, Purga y Plaga. En estos se ratificaron denuncias del periodista asesinado, que hablaban de la participación del propio Consejo de la Judicatura, jueces, operadores de justicia, policías, entre otros, al servicio del crimen organizado. Entre los condenados destacan Wilman Terán y Pablo Muentes.

¿Qué viene ahora?

Edificio de la Fiscalía, custodiado y con vallas.

De acuerdo con el jurista Edgar Neira Orellana, a Diana Salazar ya se le había acabado su periodo en abril y ahora estaba con funciones prorrogadas. “Era cuestión de semanas o meses su salida”, dice. Por ello, considera casi natural que haya renunciado a su cargo.

A lo que sí se aspira, dice Neira, es a “que haya un proceso de selección de nuevo fiscal conforme a la ley. Que quien sea elegido, no esté al servicio del poder, sino al servicio de la legalidad y la decencia”.

Además, asegura que la salida de la fiscal plantea dos temas:

  • El primero es un reto institucional. Debe haber un proceso regular y jurídico para designar al o a la fiscal. Este debe cumplir con las características de idoneidad, imparcialidad y honradez, de manera similar a lo que ha venido haciendo Diana Salazar, dijo.  El proceso de selección está en manos del actual Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS). Debe haber una sucesión apegada a la ley.
  • En segundo lugar, está la evaluación del trabajo de Salazar, que a decir de Neira ha sido valiente y “merece el aplauso de pie por parte de la ciudadanía”. Sin embargo, pide no olvidar que también la Corte Nacional de Justicia (CNJ) ha contribuido a que el trabajo esforzado de Diana Salazar tenga efecto positivo. Se han emitido sentencias que han apoyado las investigaciones de Salazar.

Riesgos, violencia de género, amenazas de muerte

A parte de los  logros, también debió enfrentar amenazas de muerte. Ahora se sabe (por filtraciones ilegales que vienen del propio correísmo) que posiblemente el contrato de sicariato, por un millón de dólares, que se hizo para terminar con la vida del candidato presidencial Fernando Villavicencio, incluía también la eliminación de Diana Salazar.

Además, uno de los retos con el que tuvo que lidiar fue la fuerte campaña de desprestigio que operó en su contra. Fueron dos mujeres cercanas al correísmo quienes buscaron descalificar a la persona. Primero acusándola de plagiar su tesis. Lo cual quedó desestimado por la Universidad Central. Sin embargo, Priscila Schettini y Angélica Porras, ambas de una organización llamada Colectivo Acción Jurídica Popular lo llevaron a otras instancias.

Fue intensa la campaña, pero al final, resultó muy forzada y grotesca. Así, ambas perdieron los derechos políticos. Schettini no pudo posesionarse como asambleístas de la RC. Entre tanto, Angélica Porras tampoco pudo pasar de las primeras etapas para ser jueza de la Corte Constitucional, justamente por sus prácticas reñidas con el debido proceso. Debieron pedir disculpas.

Tomado de redes sociales. Disculpas públicas del 19 de mayo del 2025.

También se intentó instalar una narrativa de una “relación íntima” con Ronny Aleaga. Al final, se cambió la narrativa, sobre supuestas comunicaciones con información reservada. El tema tuvo apoyo de Xavier Jordán, quien incluso denunció a Salazar en EEUU.

Tanto Aleaga como Jordán son personajes que coincidieron en la piscina de Miami (en la foto de los tetones), revelada por Fernando Villavicencio y que fue el motivo por el cual Jordán pidió a Leandro Norero eliminar a Villavicencio (tal como se constata en los chats de Metástasis).

¿Y el caso del magnicidio de Villavicencio?

Un caso que queda sin terminar es el caso de los autores intelectuales del asesinato de Fernando Villavicencio. La investigación se encontraba en proceso de investigación previa (reservada), pero en estos días una filtración de información ha develado los alcances del correísmo para apropiarse y filtrar información, pese a ser ilegal.

El 8 de agosto del 2023, Fernando Villavicencio hizo una denuncia en contra de Schlumberger y las condiciones de la concesión de Auca.

Pero también se ve cómo la investigación ya señala a cinco personajes del correísmo: Jorge Glas, Xavier Jordán, Ronny Aleaga, José Serrano y Daniel Salcedo, como posibles responsables del crimen.

Si bien el caso es llevado adelante por la fiscal Ana Hidalgo, se espera que los temas sigan avanzando con la rigurosidad y valentía que este amerita. Salazar, en un video de despedida, agradeció a Wilson Toainga, fiscal subrogante, también prorrogado en funciones, porque “con su entereza y determinación logramos cumplir los objetivos en este camino”. También aseguró que tiene “la confianza absoluta de que el doctor Toainga continuará con el trabajo como lo ha venido haciendo estos años hasta ser reemplazado por él o la titular”.

En este sentido, Neira considera que el esclarecimiento del crimen de Fernando Villavicencio es un tema de justicia y de exigencia democrática, que la investigación para determinar a los responsables intelectuales del crimen culmine y llegue a un feliz término, asegura.  Así la Fiscalía, debe continuar con la investigación, con apego a la ley, dice.

Para Neira en estos años, sí se ha generado una cierta institucionalidad, tanto en Fiscalía como en la Corte que pueden coadyuvar a que se continúe en la línea. Por ello, el abogado dice que no ve con “tremendismo” la salida de Salazar.

De todas maneras, considera que sí genera una gran interrogante las razones para haber renunciado, en este momento, de manera repentina.

¿Quién es Wilson Toainga, el fiscal que llevará los pendientes de Salazar?

Wilson Toainga, segundo desde la derecha, durante el caso Purga.

Wilson Toainga acompañó a Diana Salazar como fiscal subrogante durante seis años, es decir el mismo tiempo en que ella fue fiscal general. Es doctor en Jurisprudencia y abogado de los Tribunales de la República. Se tituló en la Universidad Central del Ecuador. Tiene un Posgrado de Especialidad en Derecho Penal y Justicia Indígena, es magíster en Derecho Penal y Criminología, ambos por la Universidad Autónoma de los Andes.

Cuenta, además, con una especialidad en Derecho Procesal Penal en la Universidad APEC de República Dominicana. Tiene cursos en nuevas tecnologías y delitos informáticos, precursores químicos, seguimiento e investigación, técnicas especiales de investigación contra el crimen organizado y lavado de activos, entre otros.

Debido al periodo de maternidad de Diana Salazar, fue el fiscal que debió llevar adelante (en momentos clave) los casos Purga y Metástasis. Toainga también es recordado porque estuvo a cargo del caso Nos faltan 3 (caso del asesinato de los miembros del equipo periodístico de Diario El Comercio).