CÓMO GUNVOR SE APODERÓ DE FLOPEC



CÓMO GUNVOR SE APODERÓ DE FLOPEC

Contenidos La Fuente23 enero, 202220min
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Gunvor, la empresa suiza de capitales rusos, que manejó el crudo ecuatoriano a través de los contratos de Petrochina, también extendió su control al negocio de transporte con otra empresa estatal:  la Flota Petrolera Ecuatoriana, Flopec. Los cerebros de esa cooptación fueron el canadiense Raymond Kohut y el estadounidense William Sudhaus. El primero fue la cabeza de Ursa Shipping Ginebra, Gunvor Bahamas y Clearlake Shipping (brazo marítimo de Gunvor), el segundo lideró la corporación Core Petroleum (hoy Core Sinergy LLC) y sus compañías Ursa Shipping Hong Kong, Baere Maritime, Dragun USA, Core Transport, Mjølner Shipping.

Todas estas empresas se encuentran relacionadas a Gunvor y el control sobre Flopec pasó por el empresario Enrique Cadena, que hizo “el lobby entre Petroecuador y las empresas asiáticas, él fue el enlace que instrumentó todo con William Sudhaus y Raymond Kohut”, dice un funcionario de Flopec entrevistado por pi cuyo nombre mantenemos en reserva.

Las empresas de Core acapararon los contratos para fletamento de buques y lideraron distintas asociaciones comerciales con Flopec para la administración y el arrendamiento de los barcos. 

Jaime Condoy, gerente de FLOPEC

Kohut, viejo amigo de la naviera, viajó varias veces al Ecuador para concretar negocios con las autoridades de Flopec, la última vez que estuvo en el país fue en agosto de 2020, cuando la justicia federal de los Estados Unidos ya lo investigaba. El 26 de agosto de ese año se reunió, en el restaurante Sur, en el norte de Quito, con el entonces gerente general de Flopec, Jaime Condoy Blacio. Estas reuniones eran para avanzar en la recuperación de cartera de Petrotailandia (PTT) y Unipec y discutir su permanencia en la asociación de transporte “Andes Tankers”, de la que era parte desde 2015 con la compañía Clearlake Shipping. En ese acuerdo también estaba la naviera chilena Cape Tankers. El objeto de esta sociedad fue la contratación en conjunto de naves tipo Aframax.

William Sudhaus a su vez llevaba personalmente sus negocios en Flopec y de eso hay varios registros; como la minuta de la reunión del 30 de abril de 2019 en el hotel “New York Palace”, de Nueva York, a la que Sudhaus asistió para reunirse con Fernando Larrea, entonces gerente general de Flopec y Pilar Ferri, jefe de fletamento. También estuvieron presentes los ejecutivos de Core Petroleum, Casey Dalcher, Warren Hansen y Roberto Dongo; Jon Jackson de Mjølner Shipping y Axel Maurer del bróker McQuilling Partners Inc.

En esa ocasión hablaron sobre la situación del mercado petrolero, de buques tanqueros y las deficiencias que tenían las naves de Flopec debido a su diseño y menor tamaño; así como de la versatilidad que tenía Core para conjugar el negocio de intermediación petrolera con el transporte en buques tanqueros. Resaltaron en esa reunión la flexibilidad del “pool” Dragun-Mjølner y expresaron sus intenciones de expandirse en el mercado de buques tipo Aframax y Suezmax con miras a atender el mercado de crudo ecuatoriano. La idea era que Core Petroleum y Flopec conformasen un pool de Aframaxes.

Estructura accionaria de las empresas que suscribieron contratos con Flopec, que pertenecen al Grupo Core Petroleum LLC.  Ty Shimada fue gerente de comercio de crudo en Core. Fuente EP Flopec

Si hay algo que sabe hacer muy bien Core Petroleum es seducir a funcionarios públicos: almuerzos en restaurantes de alto nivel, viajes, dinero en efectivo; son algunas de las estrategias utilizadas, como el departamento que rentó, en el sector de El Bosque, para una alta autoridad de Flopec, o el viaje de placer a Perú que le costeó a otro funcionario y su familia.

De las celebraciones entre Core Petroleum y Flopec también hay registros, incluso fotos, como las del 4 de diciembre de 2020, durante una reunión en la que, el gerente general de Flopec, Jaime Condoy, el ejecutivo de Core, Roberto Dongo y Axel Maurer de McQuilling Partners, celebraban -a mas de las fiesta de Quito- la firma de la adenda 3, que meses atrás fue suscrita en Nueva York, Estados Unidos, por Jaime Condoy Blacio, como gerente general y Casey Dalcher, como vicepresidente de Dragun.

El accionista de Amazonas Tanker es Amazonas Holding LLC. El pool es administrado por Ty Shimada de Core. El bróker McQuilling Partners Inc. participó en varias de las negociaciones entre Core y Flopec, es “el tercero imparcial”, que emite el avalúo de las rutas y el valor del flete para las partes.

La firma de la adenda 3 -con la que se creó la asociación Amazonas Tanker Pool-, se originó del primer contrato de arrendamiento firmado con la empresa Dragun USA LLLP, en diciembre de 2018. 

De izquierda a derecha, Axel Maurer, del bróquer McQuilling Partners Inc, Jaime Condoy, entonces gerente general de Flopec y el peruano Roberto Dongo, director de Desarrollo de Negocio de Core Petroleum, junto a otros funcionarios de Flopec. Maurer, que trabaja con Dongo, es el “tercero imparcial” en las negociaciones entre Core y Flopec. La reunión tuvo lugar en el restaurante Nuum, de Cumbayá en Quito.

La foto muestra el inicio de la celebración por las buenas relaciones comerciales de Core Petroleum y Flopec. Lo que empezó con un almuerzo terminó en una jarana de más de siete horas. El alcohol y quien sabe otras sustancias fue lo que menos faltó. Tan inolvidable fue la fiesta que terminó con una denuncia penal por violación sexual.

En el mundo del transporte del crudo es conocido que Dragun es una empresa relacionada a Core, parte del grupo Gunvor. Cuando el legislador Fernando Villavicencio le preguntó a Jaime Condoy si conocía a los dueños de Dragun, este respondió que no. Sin embargo en la foto superior el mismo Condoy está sentado a la derecha de Dongo, ejecutivo de Core, dueña de Dragun. Aunque reconoció que firmó la adenda 3 en New York, dijo no tener razón para conocer las identidades de los dueños de la contratista. Las minutas de esa negociación -y las fotos, evidentemente- desmienten su versión. 

Este medio tuvo acceso a los registros de la reunión realizada el 11 de marzo de 2020, un día después de firmada la adenda 3, en las oficinas de Mjølner en Nueva York, a la que asistieron Condoy, gerente general; Esteban Ulloa, entonces gerente comercial encargado de Flopec; Roberto Dongo, Casey Dalcher y Warren Hansen por Core Petroleum; Jon Jackson, Robert Lyons, Sebastian Perskaas, Steve Kopecki y Jahn Gerdes por Mjolner Shipping (operadora de buques petroleros de Core); y Axel Maurer de McQuilling, para tratar las condiciones en las que operaría Amazonas Tanker. En el documento constan las firmas de Condoy, Dalcher y Lyons.

Otro recuerdo de los buenos tiempos

Parados, de izquierda a derecha, Jaime Condoy, es el cuarto de la fila. En cuclillas, de izquierda a derecha: Roberto Dongo (tercero de la fila) y Axel Maurer ubicado al final.

Las primeras gestiones para la firma de esa adenda se dieron cuando Condoy asumió la gerencia general de Flopec, cargo al que llegó con el apoyo del entonces ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, José Agusto Briones, que también fue sobornado por Gunvor, según la vesión de Kohut. En el contexto en el que el Gobierno de Lenín Moreno anunciaba que estaba en nuevas conversaciones con China para la obtención de nuevos créditos respaldados con petróleo, se reunieron Roberto Dongo, de Core Petroleum; Mauricio Samaniego, entonces gerente de comercio internacional de Petroecuador; Esteban Ulloa y Jaime Condoy de Flopec para analizar otras opciones de negocios para Core-Mjølner Shipping, que en ese entonces ejecutaba los contratos a través del transporte naviero en buques tanqueros.

Se habló que los chinos tenían alrededor del 30% de las cargas de los contratos a largo plazo y que, de concretarse la preventa con Lenín Moreno, Petrochina pasaría a tener entre el 70% u 80% de las cargas (porque se hablaba, incluso, que con estos nuevos créditos externos saldarían las deudas con Unipec y PTT). 

Acuerdo y expoliación 

Para Petrochina los precios preferenciales que tenía Flopec gracias a la Ley de Facilitación de las Exportaciones era un problema porque encarecía el precio del petróleo. “Los chinos siempre decían que Flopec abusaba con el flete, entonces idearon un mecanismo para bajar los valores a niveles de mercado, incluso que no pueda usar sus barcos, esto para pagarle solo un diferencial del 10%, dice la fuente a pi. La parte que más afecta a los ecuatorianos, dijo el funcionario de Flopec, está en la “clasificación de los barcos por tipo de prioridad y el protocolo de comunicaciones que faculta a Petrochina la contratación de buques de terceros”.

La Ley de Facilitación de las Exportaciones habla de la reserva de carga para las compañías ecuatorianas, donde el Estado tiene una participación del 51%, pero con el “framework” rompieron ese derecho. 

El “framework” es un acuerdo entre Petrochina y Flopec que se convirtió en un dispositivo que obligó a la naviera ecuatoriana reducir sus ganancias que por ley estaba obligada a recibir, todo esto para abaratar el costo del flete en favor de los chinos porque mientras más dinero se ahorraban, mejor repartían las ganancias con las intermediarias.

Con la aplicación del “framework”, suscrito en 2014, Mjølner Shipping tenía amplias facultades para moverse en el negocio y Flopec apenas recibía el 10% de los fletes y en ocasiones ni siquiera podía usar sus embarcaciones. El framework motivó también la suscripción de un contrato de fletamento (COA) en 2018, con Dragun, subsidiaria de Core, que le permitió a Flopec cierta participación en las cargas de Petrochina a través del pool de buques Aframax de Mjølner.

De este contrato salió la adenda 3 con la que se creó Amazonas Tanker Pool, que fue una especie de contrapeso a la asociación Andes Tankers creada en 2013, de la que Kohut era parte y que estuvo vigente hasta octubre del 2020. El no ser elegido para integrar Andes, molestó a William Sudhaus de Core. Según testimonios de funcionarios de Flopec, en algún punto del camino de los negocios navieros, Sudhaus y Kohut se volvieron enemigos.

El framework ha significado para Flopec mas de un dolor de cabeza, fue suscrito el 8 de diciembre de 2014, en Houston, Estados Unidos, por su entonces gerente general, Danilo Moreno y Petrochina International Company; en ese documento consta también la firma del gerente de Comercio Internacional de Petroecuador de esa época, Nilsen Arias, como testigo. “Hubo presiones de Nilsen Arias para la firma de este acuerdo”, dice una fuente a pi

Este documento, framework, estableció beneficios para Petrochina, a través de la contratación de buques aplicando una prioridad comercial, que se detalló así: primera prioridad: buques de bandera, tripulación y propiedad ecuatoriana operado por Flopec, que siempre fue limitante por su escasa flota. La segunda prioridad tiene el candado de una tarifa fija que se ejecuta solo cuando Flopec o Petrochina arrienden buques por un período de al menos seis meses, con opción a turnar el uso de buques. Tercera prioridad, por supuesto es la que corrientemente se usó: buques de terceros del mercado spot (por viaje) presentados por Flopec o Petrochina. “Ahora, si Flopec no tiene buque propio, Petrochina tiene la prioridad para buscar en el mercado antes que Flopec, y si ellos no encuentran, recién Flopec puede entrar”; ha sido un trato insignificante y triste al derecho de los ecuatorianos y su transporte de la carga. Petrochina, aplicando la última prioridad contrató los buques de Mjølner Shipping, de Core a un precio pactado entre privados.

La creación de Amazonas Tankers Pool, en marzo de 2020, como no es de extrañarse, representa ventajas para Core, “que optó por convertirse en un intermediario de buques tanqueros de la mano de Flopec, para así influenciar en el mercado de tarifas de fletamento a favor de Petrochina, mediante la aplicación del “Flete Ecuatoriano”, factor que genera descuentos onerosos en el valor a pagar por la carga entregada por Petroecuador”, dice la fuente a pi

Otro beneficio de Core está representado en la cláusula que le da la potestad al administrador del pool, en este caso Core, de decidir qué buques forman parte de la asociación. 

Bien podría Flopec conseguir el mejor barco, pero es Core quien tiene la última palabra. A eso se suma, que Flopec tomó buques viejos, de baja calidad y cuestionada procedencia, como las embarcaciones de la compañía General National Maritime Transport de Libia, investigada internacionalmente por comercialización de crudo iraní.  “Como Core no es dueña de nada, no tiene barcos, arrienda barcos y se los subarrienda a Flopec a precios mayores de los pactados con el dueño de la embarcación”.

A más de que la naviera ecuatoriana se ve perjudicada porque los ingresos se reparten sobre la base de quien tiene el mejor buque, con el mejor desempeño. Core obviamente tiene los mejores buques en la flota de Amazonas Tankers Pool, lo que la hace acreedora a más del 50% de las ganancias de esta asociación, que, además, obtiene beneficios de los arriendos de las naves alquiladas a Flopec en Time Charter. Así, “Core recibe casi la totalidad de los ingresos por el transporte de crudo ecuatoriano”, dice el funcionario.