GLAS CONMINA A PÁEZ A PROBAR DENUNCIA SOBRE TRANSFERENCIAS



GLAS CONMINA A PÁEZ A PROBAR DENUNCIA SOBRE TRANSFERENCIAS

4 enero, 201523min
4 enero, 201523min
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Trasferencias por USD 22,8 millones, autorizadas presuntamente por dos ecuatorianos, uno de ellos vinculado al Vicepresidente de la República, fueron denunciadas por el legislador Andrés Páez. El asambleísta envió una carta al presidente Correa para que se investigue de dónde estos dos ecuatorianos sacaron esos montos para depositarlos en dos bancos en paraísos fiscales. El vicepresidente Glas reaccionó casi tres semanas después de que la información circulara. Calificó de infundadas las denuncias, de pasquín al listado de transferencias y amenazó con juicios a quienes afecten su reputación.

Casi tres semanas después de que Andrés Páez hiciera pública las denuncias de transferencias millonarias de bancos de China hechas por dos ecuatorianos, el vicepresidente Jorge Glas reaccionó. En un comunicado institucional difundido por la Secretaría de Comunicación dijo:

«Expresamos nuestro profundo rechazo ante las declaraciones tendenciosas e infundadas realizadas por el Asambleísta de CREO Andrés Páez, que pretenden vincular maliciosamente al señor vicepresidente, Jorge Glas Espinel, con supuestas transacciones bancarias y con falsas acusaciones argumentando la sola presentación de un burdo pasquín sin firma de responsabilidad.

«A su vez conminamos a que, de existir sustentos reales y serios, se presente una acusación contra quien corresponda ante las autoridades competentes, con firma y rúbrica, cumpliendo con el proceso que nuestras leyes exigen.

«Llama la atención que los medios de comunicación den espacio a un documento que el mismo asambleísta Páez reconoce no se trata de una denuncia, tendría una fuente anónima, más cuando proviene de un asambleísta que se ha caracterizado por este tipo de comportamientos irresponsables y ligeros.

«El asambleísta ha omitido todo ejercicio responsable de investigación, verificación previa, contextualización, induciendo inclusive a los medios de comunicación, a desarrollar su ejercicio periodístico alejados de lo previsto en el numeral primero del artículo 18 de la Constitución de la República y 22 de la Ley Orgánica de Comunicación.

«El señor vicepresidente de la República se reserva su derecho a ejercer las acciones legales que correspondan contra quienes afecten su reputación y su honra».

Vía mensaje electrónico, este medio pidió al ingeniero Ricardo Rivera su versión de los hechos y sus respuestas a las acusaciones del asambleísta Páez, sin obtener respuesta hasta el momento.

¿A dónde fueron USD 22,8 millones?

La agenda de Rafael Correa en su visita oficial a la República Popular China, orientada en principio a reactivar varias líneas de crédito congeladas desde el primer trimestre de 2014, deberá sumar un tema que se lo ha manejado entre dientes en los corrillos de Carondelet: una presunta trama de corrupción que incluye millonarias transferencias bancarias (U$22.8 millones) realizadas aparentemente por dos ciudadanos ecuatorianos, Ricardo Rivera y José Alvear, a través de cuentas bancarias de empresas domiciliadas en paraísos fiscales.

El complicado asunto fue advertido por el legislador opositor Andrés Páez, a través de una misiva dirigida al primer mandatario ecuatoriano la víspera de su viaje a China. En ella, el asambleísta a más de informar que el caso está siendo investigado por autoridades de Estados Unidos y China, pide a Correa investigar el hecho, considerando que, uno de los involucrados, Ricardo Rivera Aráuz, es tío del vicepresidente de la República, Jorge Glas Espinel, a quien incluso representó en al menos una reunión oficial con empresarios y representantes del gobierno en Beijing.

El registro presentado por Páez incluye 27 presuntas transferencias por un total de USD22 millones 800 mil dólares, de los cuales U$SD 17 millones 435 mil dólares, constan en 13 transferencias, aparece en la lista, autorizadas por Ricardo Rivera. Estas se realizaron a la cuenta 114-43631981951, del banco HBSC de Hong Kong (The Hong Kong and Shangai Banking Corporation), a nombre de la empresa Glory International Industry Compañy Limited, domiciliada en Hong Kong. Por su parte, el nombre de José Alvear, asoma en 14 movimientos bancarios en instituciones financieras del paraíso fiscal de Panamá: Banisi y AustroBank, cuyas cuentas pertenecen a las empresas Bielbasilea Corp., Infinitum Reliance Consultans Inc., entre otras.

Según el Registro Público de Panamá, la compañía Bielbasilea Corp., fue inscrita el 16 de febrero de 2012 con el número 761149, en la notaría primera, en ella figura como uno de sus directores, Ricardo José Alvear C.

En su carta el legislador de CREO destaca la relación de Ricardo Rivera Aráuz con Jorge Glas Espinel, quienes a más de los lazos familiares aparecen vinculados en las empresas de telecomunicaciones: Televisión Satelital Tesat, Trasmidatos, Raloin, Ingelectra. Rivera y Glas, figuran también como socios en el canal Televisión Latina de Miami.

Más allá de los nombres, las compañías de Rivera-Glas jamás despuntaron, tanto así que, en octubre del  2006, la Senatel (Secretaría de Telecomunicaciones) resolvió revertir la frecuencia de Trasmidatos porque no pudo cancelar una cuota de 1110 dólares. Algo similar ocurrió con Televisión Satelital, una estación que no logró salir del ranking marginal en el que se mantuvo desde cuando Jorge Glas dirigía un espacio de opinión, hasta que la revolución lo catapultó a la gran pantalla de los proyectos estratégicos bajo tutela del capital chino.

La relación Rivera y Glas

El nombre de Ricardo Rivera, ocupó titulares en los medios de información durante el bautizo de la revolución ciudadana (Marzo de 2007), cuando sorpresivamente fue nombrado intendente de Telecomunicaciones, mientras su sobrino y socio, Jorge Glas, era presidente del Fondo de Solidaridad, entidad que tenía a su cargo el manejo de las empresas eléctricas y de telecomunicaciones. Esto generó un conflicto de intereses entre el órgano de control (Supertel) y las empresas controladas.

La designación de Rivera la hizo el entonces superintendente Paúl Rojas, al día siguiente de ser designado por una mayoría del Congreso de la denominada “partidocracia“. Voces de Carondelet coincidieron entonces que quien intervino en el cambio del orden de la terna -en la cual Rojas constaba tercero- y negoció los votos de Sociedad Patriótica, Prian y Partido Socialcristiano, fue Jorge Glas.

Rojas fue nombrado superintendente pese a existir impedimentos legales, al ser propietario de Advicom, una compañía proveedora de equipos de telecomunicaciones. Hasta horas antes de su designación, Paúl Rojas hizo negocios directos con Ricardo Rivera, representante de Trasmidatos y Televisión Satelital; además, adquirió a Rivera un predio para instalar antenas de Advicom en la provincia de El Oro. Una vez posesionado, Rojas transfirió la representación de Advicom a Patricio Luna Espinel, primo de Renán Borbúa Espinel, diputado de Sociedad Patriótica y primo del expresidente Lucio Gutiérrez Borbúa.

No solo eso, en el gobierno de Rafael Correa, la empresa del superintendente suministró e instaló los equipos de la Radio Pública y del canal del Estado, Ecuador TV, estación en la cual el jefe de mantenimiento de transmisores, era Marcelo Vélez, cuñado de Paúl Rojas.

Uno de los cuestionamientos a Ricardo Rivera se basaba en que mantenía una doble e incompatible representación: primero figuraba como concesionario de frecuencias de Televisión Satelital ante el Conartel (Consejo Nacional de Radio y Televisión), y al mismo tiempo actuaba como Superintendente Encargado ante el mismo organismo.

Esto quedó en evidencia en mayo de 2007, una vez que el Conartel autorizó la instalación de una repetidora para Televisión Satelital en el sur de Quito, cuando Rivera era intendente de Telecomunicaciones. Otro conflicto de intereses se presentó en el Conatel (Consejo Nacional de Telecomunicaciones), donde Rivera en calidad de delegado del superintendente debía fiscalizar a las empresas públicas de telecomunicaciones, en las cuales su máximo representante era su sobrino y socio, Jorge Glas.

Las relaciones de Rivera y Glas con funcionarios del gobierno de Lucio Gutiérrez, siempre fueron buenas. Tanto así, que la concesión a favor de Trasmidatos fue autorizada en mayo de 2004 por Augusto Espín Tobar, quien se desempeñaba entonces como director de Gestión del Espectro Radioeléctrico. Ya en el gobierno de Rafael Correa, Espín asumió la gerencia de la estatal Telecsa en 2009, empresa que luego fue absorbida por la Corporación Nacional de Telecomunicaciones CNT, cargando un pasivo de 200 millones de dólares.

Actualmente, Augusto Espín está al frente del Ministerio de Telecomunicaciones. Todo parece indicar que al comienzo del gobierno de Correa, fue la mano de Glas la que condujo a un grupo de exfuncionarios de Gutiérrez a enrolarse en la revolución ciudadana, entre los que se destacan Augusto Espín y Jaime Guerrero.

Rivera en China, un enviado complicado

Una vida marcada por encuentros engorrosos llevan Rivera y Glas. El segundo mandatario siguió los pasos de su tío, tanto en lo académico como en los negocios. Aunque tardíamente, Glas se graduó el 2008 en la Espol (Escuela Superior Politécnica del Litoral), de ingeniero en electricidad, especialidad en electrónica, cuando ostentaba la presidencia del Fondo de Solidaridad en el gobierno de Rafael Correa. Su tesis fue cuestionada por haber sido plagiada en gran medida del portal “Rincón del vago“.

Esa relación del mundo empresarial privado, parecía replicarse en el escenario público, aunque de forma desatinada y alejada del campo legal. Así se puede entender la actuación de Rivera en la Supertel, Conatel, Conartel, y más aún ostentando una supuesta representación de su sobrino en reuniones en China.

Uno de los viajes de Ricardo Rivera a la República China, se realizó en julio de 2010, atendiendo una invitación de Gyver Lo Yuk Kuen, gerente de Génesis Systems lntemational Ltd. empresa especializada en la fabricación e instalación de satélites. El interés central de Glas en China estaba dirigido a lograr el financiamiento para su proyecto estrella de la Refinería del Pacífico.

Aunque los documentos remitidos por Génesis estaban dirigidos al ministro de Sectores Estratégicos, Jorge Glas, sin embargo quien asistió a la reunión en Beijing, fue su tío Ricardo Rivera, sin tener ninguna representación pública. Rivera se hospedó en el hotel cinco estrellas, “Beijing Kerry Centre Hotel- A Shangra“, que incluía una cama “king size“.  Los costos fueron pagados con la tarjeta de crédito del gerente de Génesis.

La participación de Rivera en la referida visita a Beijing, mereció una serie de reclamos de las autoridades y empresarios chinos, debido a la “arrogancia“ del delegado de Jorge Glas, que pese a haber solicitado ser tratado como una persona de alto nivel del gobierno ecuatoriano, no presentó ninguna acreditación.

Aunque la observación principal se refiere a que Rivera había mencionado que Ecuador no cuenta con recursos económicos, ni petróleo para cubrir un posible acuerdo con la compañía. Varios comunicados del gerente de la multinacional subrayan la complicada actuación del “enviado especial“ que dejó en mal predicamento al gobierno de Ecuador.

La caída de Zhang Kunsheng

La sorprendente revelación de la lista de millonarias sumas de dinero, realizada por Páez, involucrando a un familiar del segundo mandatario ecuatoriano, se presenta de forma simultánea a la destitución del representante del gobierno chino para América Latina y el Caribe, Zhang Kunsheng, acusado de corrupción por la alta jerarquía del Partido Comunista Chino (PCCH).

Pero, la caída de Zhang no es la primera ni será la última de las radicales acciones asumidas por el Presidente Xi Jinping, en la cruzada anticorrupción sin precedentes, luego de la muerte de Mao Zedong.

Desde que Xi Jinping asumió el poder en 2012, más de 60 000 funcionarios del partido comunista han sido procesados y otros están ya encarcelados o han sido ejecutados, incluyendo más de 30 figuras de la más alta “nobleza roja“. Son casi 70 oficiales investigados que han preferido suicidarse a dar la cara en los tribunales.

El disparo anticorrupción más alto del presidente Xi ensordeció a la cúpula del Partido Comunista (PCCH), cuando puso en la silla anticorrupción al tercer hombre más poderoso de China, Zhou Yongkang, dejando en evidencia que la proclama de alcanzar tanto a “moscas” como a “tigres”, no eran palabras al viento. Zhou, fue nada más y nada menos que director de China National Petroleum Corporation (CNPC), la mayor compañía del país, propietaria de Petrochina, la empresa que comercializa el 90% del crudo ecuatoriano.

El desplome de Zhang Kunsheng en América Latina, ha generado desconcierto en altos funcionarios de los gobiernos de Venezuela, Ecuador, Cuba, Argentina, Nicaragua y Brasil, con quienes hizo florecer no solo mega negocios, sino sentidas amistades. Todos saben que Zhang tiene un peligroso disco duro, lleno de negocios que involucra cerca de 100 mil millones de dólares en créditos e inversiones, y las consabidas tajadas de ese pastel.

Los grandes acuerdos de líneas de crédito e inversiones de China en la región, es decir, el oxígeno del dragón para salvar a algunos “jaguares“ aliados (Maduro, Correa, Ortega, Fernández, Russeff), estaban en control de Zhang. Todo el mapa del reparto de la riqueza: reservas estratégicas de petróleo, minería, gas, telecomunicaciones, bajo dominio del gendarme asiático, y sus apéndices nacionales.

Aunque en el mágico mundo mediático se dore la píldora del “desarrollo“, el mundo no puede ignorar que a más de capital fresco para endulzar el paladar de países y gobernantes sedientos de recursos económicos, China también montó un ejército de funcionarios armados de una fórmula que pervierte los procedimientos para asegurarse el financiamiento y la construcción de obras faraónicas en América Latina y África, engrasando la maquinaria de corrupción con sobornos y coimas a funcionarios criollos. La receta ha generado una casta de nuevos ricos regados por el mundo, con centenares de empresas y gordas cuentas bancarias en paraísos fiscales.

En una visita oficial realizada en enero de 2014 a China, el vicepresidente Jorge Glas, identificó el interés de su gobierno y el gigante asiático, con el manido “ganar, ganar“: “Ecuador necesita los recursos financieros para sostener su modelo de desarrollo, el país andino tiene los recursos renovables que necesita China para mantener su crecimiento».

 La fórmula del eterno círculo de la dependencia.

Las acciones anticorrupción de Xi Jinping intentan impedir que la segunda potencia económica mundial, acabe como la primera en corrupción del planeta, por ello se vuelve evidente que está asumiendo las lecciones de Confucio: “Promueve hombres honestos, colocándolos por encima de los corruptos y ganarás los corazones de las personas. Promueve hombres corruptos, colócalos por encima de los honestos y la gente no te apoyará.“ No hay poder en el mundo que sobreviva a la corrupción.

Esta investigación fue realizada por Fernando Villavicencio Valencia;  publicada por Plan V el 04 de enero de 2015.