Termogas Machala: Una central en deterioro

Uno de los temas centrales de la entrevista es la central termoeléctrica Termogas Machala, que Jaramillo describe como un ejemplo claro de la mala gestión en el sector eléctrico. Según el ingeniero, la planta, construida con una inversión significativa, solo está operando al 30% de su capacidad debido a errores en su diseño y construcción. Estos fallos no solo han limitado la producción energética, sino que también han provocado un uso ineficiente del gas natural, un recurso con un gran potencial en la región.

Jaramillo subraya que este problema es representativo de una tendencia más amplia en Ecuador, donde la falta de planificación y la ejecución deficiente de proyectos energéticos han resultado en una infraestructura que no responde a las necesidades del país. «No es solo un problema técnico, sino también un problema de falta de visión y responsabilidad en la gestión pública», afirma Jaramillo.

El potencial no aprovechado de las energías renovables

La entrevista también explora el potencial de las energías renovables en Ecuador, un país con abundantes recursos naturales que, según Jaramillo, han sido subutilizados. La energía solar, en particular, es mencionada como una solución viable para reducir la dependencia del gas natural, especialmente en aplicaciones domésticas y comerciales. Sin embargo, Jaramillo señala que la adopción de estas tecnologías ha sido lenta debido a la resistencia de ciertos sectores a cambiar el modelo energético actual.

El ingeniero critica la falta de políticas públicas que incentiven la inversión en energías renovables y la implementación de tecnologías más limpias. Según él, Ecuador podría beneficiarse enormemente de una mayor diversificación de su matriz energética, lo que también contribuiría a mitigar los efectos del cambio climático y reducir la huella de carbono del país.

Corrupción y crisis energética: Un problema estructural

Uno de los puntos más polémicos de la conversación es el impacto de la corrupción en la crisis energética de Ecuador. Jaramillo no duda en señalar a figuras clave como Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador, y Carlos Pólit, excontralor general del Estado, cuyas gestiones han dejado profundas cicatrices en el sector. Según Jaramillo, la corrupción ha permeado todas las capas de la administración pública, afectando gravemente la eficiencia y la sostenibilidad del sistema eléctrico.

Jaramillo describe cómo los contratos inflados, la falta de transparencia en los procesos de licitación, y la designación de autoridades sin la formación adecuada han llevado al colapso de importantes proyectos energéticos. «La corrupción no solo es un problema moral, sino que tiene consecuencias directas en la calidad de vida de los ciudadanos», señala. Esta afirmación cobra especial relevancia en un momento en que Ecuador enfrenta una crisis energética que ha dejado a muchas regiones del país al borde de apagones masivos.

La necesidad de formación ética 

Más allá de los problemas técnicos y de infraestructura, Jaramillo enfatiza la importancia de una educación que no solo forme a buenos ingenieros, sino también a ciudadanos con un alto sentido ético. En su opinión, la crisis energética de Ecuador no puede ser resuelta únicamente con mejores políticas o más inversiones, sino que requiere un cambio profundo en la cultura profesional y académica del país.

Jaramillo aboga por una reforma en la formación de los ingenieros que incluya un enfoque más sólido en ética y responsabilidad social. «No basta con saber cómo construir una planta eléctrica o diseñar un sistema; también hay que tener la integridad para hacerlo de manera correcta y transparente», comenta. Esta visión es crucial en un país donde los escándalos de corrupción han minado la confianza pública en las instituciones y han impedido el desarrollo de proyectos esenciales para el bienestar de la población.

Crítica al Gobierno de Daniel Noboa

La entrevista también incluye una evaluación crítica del gobierno de Daniel Noboa en la gestión de la crisis energética. Según Jaramillo, el actual gobierno ha mostrado una falta de previsión y acción frente a los desafíos del sector, lo que ha exacerbado los problemas existentes. «Estamos ante un gobierno que no ha sabido leer la magnitud de la crisis energética que enfrenta el país», dice Jaramillo, destacando la falta de un plan claro para evitar los apagones y mejorar la infraestructura eléctrica.

El ingeniero expresa su preocupación por la designación de autoridades en el sector energético que, en su opinión, carecen de la formación y experiencia necesarias para manejar la situación. Esto ha llevado a decisiones erráticas que, en lugar de resolver los problemas, han creado nuevos obstáculos para la estabilización del sistema eléctrico.

La conversación en «Habla Serio» concluye con un llamado urgente a tomar medidas concretas para evitar un colapso total del sistema energético en Ecuador. Jaramillo insta a las autoridades a priorizar la transparencia, la ética y la profesionalización en la gestión del sector, y a fomentar una cultura de responsabilidad y compromiso con el bien común.

Amanda Villavicencio cierra la entrevista resaltando la importancia de estos temas para el futuro del país y la necesidad de que la sociedad civil se involucre en la discusión y supervisión de las políticas energéticas. «Habla Serio» continúa siendo un espacio fundamental para el análisis y la reflexión sobre los temas más críticos que enfrenta Ecuador, ofreciendo una plataforma para voces expertas que, como la de Fabián Jaramillo, contribuyen a una comprensión más profunda de los desafíos nacionales.