El falso discurso del gobierno sobre la vacuna del Covid-19



El falso discurso del gobierno sobre la vacuna del Covid-19

Daniel Ruiz. Médico, magister en epidemiología y salud pública27 diciembre, 202012min13367
Daniel Ruiz. Médico, magister en epidemiología y salud pública27 diciembre, 202012min13367
Mesa de trabajo 822
El Sistema Nacional de Salud no cuenta con un sistema informático que permita el registro de las personas que han sido vacunadas. Si consideramos que se deben administrar al menos dos dosis de cada vacuna al día 0 y a los 21 o 28 días, llevar un registro de la segunda administración será un problema, sin considerar el transporte en estricta cadena de frío (-70 grados) de la vacuna BioNTech/Fosun Pharma/Pfizer.

El 16 de diciembre de 2020, a través de un comunicado oficial, el Ministerio de Salud Pública (MSP) del Ecuador anunció el “Plan de vacunación a través de una Alianza- Público Privada”. En el citado plan (que se muestra en un comunicado de poco más de siete párrafos, a diferencia de la CDC, Centers for Disease Control and Prevention, cuya guía interina tiene 75 páginas), esta cartera de Estado menciona que será capaz de “aplicar las dosis contra el coronavirus al 60% de la población con el objetivo de controlar la propagación del virus y bajar el impacto de la enfermedad (…)”.

Si consideramos la proyección poblacional del INEC para 2020, esto supone la vacunación a alrededor de 10 millones de ecuatorianos. No obstante, el gobierno apenas ha negociado la adquisición de 9 millones de dosis; es decir que hipotéticamente estaría en capacidad de vacunar a 4,5 millones de personas.

Ante esta situación, el Ecuador  superaría las expectativas en cuanto a la procuración de las vacunas establecida para países que se encuentran en fase de transmisión comunitaria ya que superaría  el 50% del máximo que prevé la Organización Mundial de la Salud en el contexto de la pandemia por COVID-19.

Por medio de un comunicado emitido desde el MSP el 21 de octubre de 2020 el ministro informó que existen acuerdos para adquirir la vacuna a:  BioNTech/Fosun Pharma/Pfizer, COVAXX / United Biomedical Inc. Asia y Universidad de Oxford/AstraZeneca. Además, manifiesta que mantiene conversaciones con otros fabricantes de vacunas sin que exista todavía un acuerdo firmado. Estos fabricantes/desarrolladores (miembros de la iniciativa COVAX Facility) son:

Considerando que las 3 vacunas (Universidad de Oxford/AstraZeneca, BioNTech/Fosun Pharma/Pfizer y COVAXX/United Biomedical Inc. Asia) requieren al menos 2 dosis para garantizar cierto nivel de inmunidad sería necesario administrar 20 962 483 dosis, según el mencionado plan (2 dosis a 10 481 242 de ecuatorianos que supone el 60% de la población para 2020).

La cantidad de vacunas disponible se pone en duda cuando COVAXX/United Biomedical Inc. Asia (2 millones de dosis), un fabricante domiciliado en Taiwán, se encuentra en fase 1 investigación clínica y no concluirá el proceso de investigación si no hasta el 31 de Agosto de 2021. Hay que recalcar que para que la aplicación de una vacuna a la población sea relativamente segura es necesario que esta haya cumplido con al menos 3 fases de la investigación clínica. Estas fases son:

Los datos del ensayo clínico de COVAXX/United Biomedical Inc. Asia que se encuentran publicados en la base de datos de ClinicalTrials.gov evidencia que el fabricante:

  • Se encuentra en fase 1 de investigación (con la participación de apenas 60 sujetos)
  • No ha actualizado la información concerniente al estado de la investigación desde el 29 de septiembre de 2020.
  • No muestra la información sobre los resultados obtenidos hasta el momento (seguridad eficacia).

Pese a lo expuesto, el fabricante ha declarado que su vacuna no presenta efectos adversos y que su eficacia es del 98%, una conclusión por demás apresurada considerando la fase de la investigación en la que se encuentran.  Si la vacuna de COVAXX / United Biomedical Inc. Asia se aplica a la población antes que finalicen los estudios, el gobierno estaría legitimando la experimentación clínica en sujetos sin su consentimiento, con la consiguiente vulneración de derechos y principios elementales de bioética.

En este contexto, llama la atención que el MSP haya descartado la utilización de la vacuna producida por el Instituto de Investigación Gamaleya (vacuna llamada Sputnik V), desarrollo de la Federación Rusa, aduciendo que no cuenta con publicaciones sobre los resultados de su investigación. A diferencia de la vacuna de COVAXX/United Biomedical Inc. Asia, la vacuna rusa se encuentra en fase III de investigación; información que puede ser corroborada en la base de datos de ClinicalTrials.gov.

Si la vacuna de COVAXX/United Biomedical Inc. presenta problemas relacionados con las fases de investigación (no se sabe si es segura y eficaz), la vacuna desarrollada BioNTech/Fosun Pharma/Pfizer no deja de ser una preocupación debido a su transporte y conservación.

Si bien es cierto, esta vacuna ha cumplido con el proceso de investigación (fase 3) para que su aplicación en la población sea relativamente segura en la población (fase 4) y cuenta con una eficacia de alrededor del 94 %; su conservación y transporte han hecho que para muchos países sea un verdadero dolor de cabeza.

Esta vacuna requiere temperaturas de conservación de alrededor de -70°C para garantizar que su aplicación surta efecto. Si para todos los países que han decidido usar esta vacuna la logística ha sido un serio problema, en Ecuador, según lo ha comunicado oficialmente el MSP este inconveniente será resuelto usando hielo seco “Este procesamiento garantiza que se mantenga las dosis a una temperatura menos de 70 grados centígrados y tendrá una duración de hasta seis meses”  afirma el  MSP en su comunicado.

Administrar una vacuna en la que la cadena de frío se ha roto hace que esta sea inútil ya que pierde su capacidad de generar inmunidad. No deja de sorprender la ligereza con la que se tratan los asuntos de salud pública en el país.

Hasta el momento, los problemas descritos versan sobre las vacunas y sus características o fases de investigación en la que se encuentran. Sin embargo, existe otro problema que puede hacer que la campaña de vacunación de emergencia sea inútil: la falta de un registro único de vacunación.

El Sistema Nacional de Salud no cuenta con un sistema informático que permita el registro de las personas que han sido vacunadas. Muchos hemos recibido como parte de las campañas de vacunación un “papelito” escrito a mano dónde se indica la fecha en la que se administro la vacuna. Si consideramos que se deben administrar al menos dos dosis de cada vacuna, al día 0 y a los 21 o 28 días, llevar un registro de la segunda administración será un problema.

Tenga en cuenta que no pueden existir errores y la vacuna administrada en la segunda dosis debe ser la misma. Además, todos los sujetos (o al menos una buena proporción) debe ser investigados durante algún tiempo para ver si existen efectos adversos raros y si la vacuna es efectiva. En este punto, cabe mencionar que la eficacia (fase II y III) de una vacuna se mide en condiciones de experimentación (como en un laboratorio) mientras que la efectividad (fase IV) se mide en condiciones reales (cuando se aplica a la población).

El discurso del gobierno nos hace pensar que el 60 % de la población recibiría las 2 dosis necesarias para desarrollar inmunidad, lo que supone la vacunación de alrededor de 10 millones de personas. Sin embargo, únicamente cuenta con 7 millones de dosis de vacunas que han finalizado el proceso de investigación (BioNTech/Fosun Pharma/Pfizer y Universidad de Oxford/AstraZeneca) lo que implica la vacunación de 3,5 millones de individuos. En este escenario, en el mejor de los casos, apenas el 20 % de la población será vacunada con dosis completas.

Ante esta situación y, considerando que en Ecuador el COVID-19 se encuentra en una fase de transmisión comunitaria, el país estaría ante un escenario de disponibilidad limitada de la vacuna (vacuna para entre el 11% y el 20% de la población según la Organización Mundial de la Salud)

La política del gobierno y del MSP para generar inmunidad de rebaño parecería ir de la mano de la experimentación clínica y la participación de empresas chinas para este propósito es notoria. Suena a que el gobierno actual piensa dejar el asunto de las vacunas al siguiente. La salud pública en Ecuador sigue siendo tan improvisada como lo son sus gobernantes.