Hace dos años el gobierno de Lenín Moreno inauguró la cirugía mayor contra la corrupción, una estrategia orientada no solo a perseguir delitos en contra de los bienes públicos, sino a recuperar los recursos mal habidos. Los resultados, más allá de una gigante publicidad oficial, no pasan de unos cuantos caramelos para endulzar el paladar de la ciudadanía. Uno de los sentenciados en la trama Odebrecht fue el exvicepresidente Jorge Glas Espinel, responsable del manejo de los sectores estratégicos de la economía, sobre quien recaen sospechas de enriquecimiento ilícito. Hasta hoy, la justicia muy poco ha hecho para develar la ruta del dinero y los escondites de su presunta fortuna. El presente trabajo periodístico que se basa en documentos oficiales, confirmados por nuestro equipo de investigación, busca proyectar luces sobre una red de empresas y personas relacionadas con Jorge Glas y su hermano Heriberto. Además, deja en evidencia que el gobierno de Moreno ha mantenido en reserva estos reveladores informes, desde noviembre de 2018.